A mi hijo mayor, de 16 años, le encanta todo lo relacionado con el mundo del diseño y de la publicidad. Se pasa montones de horas sentado delante del ordenador revisando la página web de la agencia de publicidad Trama, que está aquà en Valladolid. Desde niño le han fascinado los diseños que crean para las grandes marcas y desea poder hacer algún dÃa trabajos de este tipo y mezclarlos también con las nuevas tecnologÃas, usando las redes sociales. Pero para llegar a todo eso primero debe estudiar y ser de los primeros de la clase para sacar una buena nota que le permita el acceso a la universidad. Y para ello yo me propuse ayudarle creando un espacio de estudio donde se sienta cómodo y se pueda concentrar.
Pues bien, lo más importante me pareció que era que en su espacio para estudiar no debÃa de haber ningún tipo de distracción, por lo que situé el escritorio pegado a la pared, en el lateral de la habitación, no debajo de la ventana, de forma que él mirase con su silla hacia esa pared y todo lo demás de su cuarto, la música, la televisión, la ropa, los juegos, etc., le quedasen por detrás, fuera de la vista, para no incitarlo a distraerse.
La razón para no colocar el escritorio debajo de la ventana es muy sencilla. La luz es clave a la hora de trabajar o estudiar sobre un escritorio, y si nos ponemos frente a la ventana no entrará de forma directa, de manera que nos estorbará al estudiar, ya que nos está deslumbrando en lugar de darnos iluminación. No obstante, es conveniente, y yo asà lo hice, añadir un punto de luz al escritorio con un flexo para cuando se quedan a estudiar hasta más tarde y la luz general de la habitación no es suficiente cuando ya no entra la natural por la ventana.
El escritorio que escogà es muy amplio también. En esta época, los muchachos trabajan con un montón de cosas. Ya no son los tiempos de nuestras pinturas y libretas, aquà ellos consultan sus libros e incluso han de tener un ordenador en el que apoyarse y donde consultar sus dudas. Estos aparatos ocupan mucho espacio, y más si los tenemos bien equipados, con su impresora y escáner y con otro tipo de accesorios. El que yo adquirà tiene espacio para poner sus cosas y el portátil sobre la mesa y un lateral cuenta con unas barras pegadas a las patas para poder situar ahà todos los periféricos. Asimismo, del otro lado lleva cajones, donde poder echar los bolÃgrafos, correctores, rotuladores, subrayadores, etc., para que no le den sensación de desorden al verlos por toda la mesa. Asimismo, podemos utilizar los laterales de la pared para instalar una librerÃa donde ordenar todos sus manuales de consulta y que siempre los tenga a mano y a la vista.
La silla es clave también dentro de la creación de este espacio para el estudio. Los chicos no solamente tienen que sentirse cómodos a la hora de estudiar, sino que han de sentarse correctamente. Durante esta etapa su espalda está todavÃa formándose y debemos ayudar a que no sufra daños que paguen con la edad si es que no han empezado ya a sufrirlos. Hace poco escuché en la radio que 8 de cada 10 niños menores de 17 años ya habÃan sentido alguna vez dolor de espalda, y ese mismo médico recomendaba que sus mochilas no pesasen más que el 10 por ciento de su peso corporal.
Dónde equipar la zona de estudio
Si no tenéis todo lo que os indicamos para preparar una buena zona de estudio para vuestros hijos o simplemente queréis renovar las piezas existentes por unas mejores, os recomendamos que compréis todo el mobiliario en CÃrculo Muebles, una tienda de muebles de origen español donde cuentan con todo tipo de piezas de excelente calidad y a muy buen precio. Además, si no queréis pasaros la tarde de tiendas ni cargarlo en el coche, podéis comprar en su tienda online y os lo llevarán a casa enseguida para que vuestros niños no pierdan ni un segundo de estudio en su nuevo espacio.