¿Sabéis lo que sería verdaderamente una pasada? Llegar a tu casa y sentirte como si estuvieras en un hotel de lujo, estilo a este aparthotel en Barcelona centro, ¿habéis estado alguna vez? Es el Boria, de la cadena Mercer Hoteles, y es precioso. Tiene todos los detalles pensados para que la estancia sea perfecta, y una decoración que merece un premio para el diseñador porque desde luego que merece la pena pagar lo que se paga para pasar una noche en sus habitaciones.
Muchas personas son de la opinión de que los hoteles de lujo carecen de ese toque hogareño que quieren para su casa, para ellos es como si les faltara personalidad, pero yo no puedo estar más en desacuerdo con ellos. Para mí, el diseño de muchos de estos hoteles de lujo como el que os hablaba antes, están llenos de detalles que hacen de la estancia en sus habitaciones toda una experiencia cálida y confortable. Yo, si pudiera permitírmelo, pagaría al diseñador o interiorista que haya ideado las habitaciones del Boria para que me decorara el salón, lo que pasa es que mi bolsillo no están grande y me conformo con mi propia decoración (que tampoco está nada mal por otro lado).
Ahora está muy de moda la decoración Glam Chic, que es una mezcla en el lujo y el vintage. Se caracteriza por crear ambientes retros con toques lujosos, es como si cogiéramos el salón de la familia Brady y lo redecorásemos con algunos cuadros de lujo, un par de lámparas minimalistas y algún que otro adorno más moderno. Con respecto al sofá y las sillas habría que cambiarlas por algo que bebiera de lo retro pero que demostrara que son actuales, no sé si me explico, pero sería algo así como comprar algo nuevo que recuerde a lo viejo pero que, cuando lo observas con atención, se sabe que es actual.
Son espacios armoniosos y ori8ginales cargados de piezas especiales, diferentes, y que recuerdan un poco a tiempos pasados. Los toques florales también se enmarcan dentro de este tipo de decoración (aunque yo soy de las que piensa que el toque floral debe estar en cualquier diseño). Y es que hay pocas cosas más glamurosas que las flores para decorar. En todas sus versiones, tanto naturales como a través de plantas y de estampados en textiles, son sin duda una de las grandes opciones a la hora de dar un toque romántico a un espacio glam chic.
Pues bien, este nuevo estilo de decoración es perfecto para lo que os decía al principio de este artículo: decorar tu hogar como si fuera un hotel de lujo. ¿Entendéis el por qué? Es muy simple: porque aúnas en un mismo estilo decorativo la idea del lujo y el glamour con la idea de lo hogareño, que es el toque da el tono vintage de los adornos.
Eso sí, hay que tener cuidado con no excedernos porque intentando crear este tipo de ambientes es muy fácil caer en el barroquismo y pasarnos de excéntricos poniendo adornos aquí y allá. Hay que tener siempre en mente eso de “menos es más” y luego ponerse manos a la obra.